Hace unos días ya que tengo pendiente hacer esta entrada pero llevo unos días muy liada con otras cosas y no he podido hacerla.
El viernes de la semana pasada fui con mis amigas de la universidad a Barcelona para ir a ver una obra de teatro: La familia irreal. Hace ya bastante tiempo que esta obra está en cartelera y siempre me ha llamado la atención pero la verdad es que ir al teatro es bastante caro pero parece que ahora ha bajado un poco el precio y por eso decidimos ir.
Primero nos costó un poco encontrar un día que nos fuera bien a todas para ir, ya que todas tenemos unos horarios algo incompatibles y, obviamente, no encontramos ningún día que nos fuera bien a todas pero ese viernes fue el que nos iba mejor a la mayoría que queríamos ir.
Al final fuimos 4 al teatro. Hacia las 5 de la tarde, Mònica pasó a buscarme y fuimos a comprar la merienda antes de ir a buscar a Montse y encaminarnos hacia Sant Celoni para hacer la última parada y recoger a Laura.
Cuando ya estábamos todas en el coche fuimos hacia Barcelona. Lo mejor de todo fue entrar en las rondas de dalt y una de ellas preguntar: ¿alguna sabe por donde tenemos que ir? Todas nos miramos y ninguna lo sabía. Cada una creía que las otras lo sabrían. Personalmente sé que ellas habían ido anteriormente alguna vez a ese teatro y por tanto deduje que ya sabían llegar hasta ahí. Yo no sabía ni siquiera a qué teatro teníamos que ir. Por suerte, no tuvimos que hacer mucha vuelta y llegamos bastante rápido hasta el teatro e, incluso después de dar un par de vueltas, encontramos parking gratuito a un par de calles del teatro.
¿Lo mejor? Justo llegar al teatro me situé. Estábamos en el teatro Victoria, justo al lado de la Sala Apolo a la que he asistido un par de veces a conciertos, así que realmente sí hubiese sabido llegar pero no era consciente que esa era su ubicación.
¿Lo mejor? Justo llegar al teatro me situé. Estábamos en el teatro Victoria, justo al lado de la Sala Apolo a la que he asistido un par de veces a conciertos, así que realmente sí hubiese sabido llegar pero no era consciente que esa era su ubicación.
Llegamos al teatro bastante pronto así que aprovechamos para hacernos unas cuantas fotografías fuera del teatro e hicimos una “pequeña merienda-cena” al lado del teatro en el subway.
Por fin llegaron las 9.30 y empezó la obra de teatro. Realmente no pude parar de reír durante las más de dos horas que duró la obra. Hubo momento en que incluso estuve llorando de tanta risa. La mayoría de actores los tengo bastante vistos del programa de TV3 Polònia. En ambos sitios hacen el mismo personaje así que la mayoría de la gente ya tiene una idea de lo que va a ver y como se van a comportar pero, de todos modos, las bromas, la ironía y la forma de tratar a la realeza es algo increíble.